La UX (experiencia de usuario) hace referencia a toda la experiencia que un individuo tiene al interactuar con un producto digital, como una página web, una aplicación o un software. El objetivo de una buena experiencia de usuario es tener un uso lo más agradable, comprensible y eficiente posible.
No se trata solo de la funcionalidad, sino también de las emociones, expectativas y satisfacción del usuario. La UX incluye factores como:
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Usabilidad: facilidad de uso.
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Velocidad de carga.
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Diseño claro y ordenado.
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Navegación intuitiva.
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Adaptación a dispositivos móviles.
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Generación de confianza a través de información clara y diseño cuidado.
Ejemplo:
Un sitio web con estructura clara, un tiempo de carga rápido y un formulario de contacto fácilmente accesible ofrece una experiencia de usuario mucho mejor que una página desordenada, lenta y con información difícil de encontrar.
Importancia:
Una buena UX repercute directamente en el éxito de una web: los visitantes permanecen más tiempo, interactúan más, abandonan menos y realizan con mayor frecuencia las acciones deseadas (como una compra). Por eso, la UX es un factor clave en el diseño web, el marketing online y la optimización de la conversión. Entender las necesidades de los usuarios y ponerlas en el centro permite crear experiencias positivas y fidelizarlos a largo plazo.
