La indexación describe el proceso mediante el cual los motores de búsqueda como Google incorporan los contenidos de un sitio web en su base de datos, para poder mostrarlos posteriormente en los resultados de búsqueda. Solo las páginas que están indexadas pueden aparecer en las consultas de búsqueda.
Proceso de indexación:
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Rastreo: un rastreador (como Googlebot) descubre la página siguiendo enlaces o gracias a la información de un sitemap.
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Análisis: los contenidos se leen, estructuran y evalúan. Esto incluye textos, imágenes, metadatos y enlaces internos.
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Almacenamiento en el índice de búsqueda: si la página es relevante, accesible y no está bloqueada, pasa al índice de Google.
Ejemplo:
Publicas un nuevo artículo en tu blog. Una vez que Google lo rastrea y lo indexa, puede aparecer en búsquedas relacionadas. Sin indexación, el artículo permanece invisible, incluso estando disponible online.
Requisitos para una indexación correcta:
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La página debe ser técnicamente accesible (servidor en funcionamiento, sin errores de carga).
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No deben existir bloqueos, como etiquetas noindex o restricciones en el archivo robots.txt.
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El contenido debe ser relevante y de calidad, útil tanto para los usuarios como para los motores de búsqueda.
¿Por qué es importante la indexación?
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Es la base de cualquier estrategia SEO: sin indexación no hay visibilidad.
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Indica qué contenidos considera Google relevantes.
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Los problemas de indexación pueden limitar gravemente la visibilidad de todo un sitio web.
Conclusión:
La indexación es el paso que hace que un sitio web resulte visible para los motores de búsqueda. Solo cuando una página es rastreada, analizada e indexada, puede aparecer en los resultados de búsqueda y llegar así a visitantes potenciales.
