La accesibilidad web significa que las páginas están diseñadas para que cualquier persona pueda utilizarlas, independientemente de limitaciones visuales, auditivas, motoras o cognitivas. Esto incluye estructuras claras, suficiente contraste, textos alternativos, navegación mediante teclado, lenguaje comprensible y compatibilidad con lectores de pantalla.
Ejemplo: Una página web ofrece tipografía grande, navegación clara, subtítulos en vídeos y botones visibles.